Vitamina C -ácido ascórbico-

Algunos médicos, ante la pregunta de que si se deben tomar suplementos o vitaminas, dicen categóricamente que no, que una alimentación equilibrada es suficiente y que nos debe dar todas las vitaminas y nutrientes necesarios. Y tienen razón, solamente se olvidan de que casi nadie practica esa alimentación ideal y aunque hubiese alguien que lo hiciese, se encontraría con que los alimentos, que hace 50 años tenían todas las vitaminas y minerales que necesitamos, ahora mismo, con la agricultura intensiva ya no es así y los alimentos actuales están desvitalizados. Para darnos una idea un ejemplo: Se dice que un tomate biológico contiene unos 200mg de magnesio, un tomate de supermercado solamente 20mg. Dentro de los suplementos alimenticios que podemos tomar la vitamina C o ácido ascórbico es uno de los principales. Es curioso que los animales sintetizan en su propio metabolismo esta sustancia a partir de la glucosa y que, precisamente por eso, no se resfrían nunca. Esta vitamina es hidrosoluble, es decir, que se disuelve en agua, con lo que aunque tomásemos una cantidad mayor de la que nuestro organismo necesita la eliminaríamos por la orina. Ayuda a: reforzar el sistema inmunitario la absorción de las grasas la absorción del hierro curar heridas y quemaduras, formar el colágeno del tejido conjuntivo, tratar las infecciones del tracto urinario, aumentar la absorción del calcio, en la producción de hemoglobina y glóbulos rojos en la médula ósea. la salud de capilares, encías y dientes, la lucha contra el cáncer, ya que bloquea la producción de nitrosaminas que se cree que son cancerigenas en el funcionamiento de la glándula adrenal reducir la producción de radicales libres.

Se cree que: Reduce los síntomas del catarro común Ayuda a prevenir algunas formas de cáncer Puede reducir el colesterol Protege de enfermedades cardiacas. Previene de ciertas alergias. Es buena para todo tipo de infecciones Reduce varices y hemorroides Mejora la fertilidad masculina Retarda el envejecimiento Los alimentos que contienen una cantidad apreciable de esta vitamina son: Kiwi 37,1mg Naranja 36,7mg Limón con la pulpa 34,0mg Zumo de Limón 28,2mg Frambuesa 27,7mg Zumo de pomelo 26,3mg Rábano, cebolla 26,2mg Espinaca, Brócoli 26,1 mg Guisante 26 mg Espárrago 23,7mg Col 23,6mg Hígado 22,2mg Zarzamora 21,2mg Haba de soja 18,5mg Patata 18 mg Tomate 16,9mg Alcachofa 10,2mg Manzana 8,8mg

Fuente: "Vitaminas para su salud", Klaus Oberbeil

Los alimentos pierden vitaminas según los cocinamos por lo cual la mejor manera de comerlos son crudos o poco cocinados. En definitiva, es una vitamina indispensable y absolutamente necesaria. Tomar suplementos de ella se convierte en imprescindible para aquellas personas mayores de 50 años, obesos, y fumadores –un cigarrillo destruye 30 mg de vitamina C-.

Debemos tomar un suplento que además de vitamina C contenga tambien bioflavonoides.

En cuanto a la dosis que hay que tomar la cantidad es muy dispar: 60mg para la medicina oficial, de 250 a 1.000 mg como dosis más prescrita por los naturópatas y cantidades muy superiores en patologías concretas.